Las cadenas: A menudo, dos figuras humanas aparecen encadenadas a la figura central, representando la esclavitud a los deseos materiales o las pasiones que nos controlan.
Este arcano también puede simbolizar aspectos de la indulgencia y el deseo, instando a las personas a encontrar un equilibrio entre sus anhelos más profundos y las consecuencias que estos pueden acarrear.
La carta del diablo es una carta de tarot que representa la representación de la parte más oscura de la personalidad de uno mismo. Esta carta generalmente se asocia con la codicia, el abuso de poder, el egoísmo, la manipulación y el deseo de controlar a los demás. Esta carta también puede indicar que la persona está siendo tentada a tomar un camino equivocado.
En resumen, las lecturas de tarot con El Diablo ofrecen una oportunidad única para explorar y comprender las complejidades de nuestras vidas, desafiándonos a crecer y evolucionar en nuestro viaje particular y espiritual.
Es una carta que nos invita a reflexionar sobre la dependencia emocional y cómo nos mantenemos atrapados en un ciclo de dolor. En lugar de crecer, los involucrados se hunden más en la toxicidad de la relación.
La carta El Diablo tiene una historia rica y variada, marcada por cambios culturales y espirituales a lo largo de los siglos. Originalmente, en los primeros mazos de tarot, esta carta no 10ía la connotación negativa que a menudo se le atribuye hoy.
Contrarresta La Templanza la posible negatividad de El Diablo en el tarot, por lo que nos anuncian esas dos cartas juntas en la tirada de momentos de paz y estabilidad.
Cuando en la tirada sale al derecho nos encontramos que puede referirse a la pasión y a las adicciones -que no tienen por qué se de sustancias prohibidas-, también a los bajos instintos del ser humano.
Hay intensidad a la vez que compromiso y eso hace que se funcione bien y se tenga instinto en el puesto de trabajo o en el negocio.
El Diablo es el decimoquinto arcano mayor de la baraja. La figura principal de su carta es un diablo o un sátiro. En cualquier caso, se representa con una criatura mitad hombre, mitad cabra.
Cuando la pregunta trate sobre el amor y el consultante no tenga pareja, estas dos cartas del tarot indican que hay que ser más realistas y poner los pies en el suelo. No ilusionarnos con quien puede que no esté a nuestro alcance o no nos convenga.
A menudo, el Diablo es interpretado como see this la fuerza que nos tienta a hacer cosas que sabemos que están mal, como los excesos, las mentiras y la falta de ética. En este sentido, es importante tener en cuenta que esta carta no es necesariamente una carta negativa, sino que su significado se ajusta a cada contexto según el desafío que se presente.
También indica que la persona es materialista y tiene apego por el dinero o la riqueza. Simboliza a alguien que tiene una fuerte personalidad y también el deseo de controlar, aunque también puede ser controlado.
Como signo de Aire, los Geminis son sociables cariñosos y divertidos. Son buenos conversadores y tenaces en sus planes y objetivos, con un punto de despiste.